miércoles, 5 de junio de 2013

Bob Dylan – Sesiones de “Blood on the tracks” (Nueva York, Septiembre de 1974)



Personalmente creo que Blood on the tracks es la gran obra maestra de Dylan y, si bien sus álbumes de los 60 son soberbios (con el valor añadido de lo rompedor de su propuesta), fue aquí donde alcanzó su punto álgido como compositor y transmisor de emociones. El disco se grabó en dos fases y el contenido de este bootleg corresponde a la primera de ellas desarrollada en Nueva York entre el 16 y el 19 de septiembre (los datos que vienen en la grabación pirata dicen que se registraron entre el 16 y el 25, pero en mi opinión son más fiables las otras fechas).

Situándolo cronológicamente dentro de la biografía de Dylan hay que decir que se grabó durante su primera separación de Sara (su esposa en aquel momento) y en el se ve reflejada la turbulenta situación vivida y la fluctuación de sentimientos de amor y odio hacia su pareja. Se sabe que entró en los estudios que Columbia tenía en Nueva York el 16 de septiembre con Phil Ramone como ingeniero de sonido y que los músicos que le acompañaron fueron Tony Brown (bajo), Paul Griffin (órgano y teclados), Charles Brown III, Eric Weissberg y Barry Kornfeld (guitarras), Buddy Cage (steel guitar) y Richard Crooks (batería).

A lo largo de esos entre 3 y 9 días (varía según las fuentes consultadas) grabaron un total de 12 canciones, alguna de ellas en distintas versiones, y rápidamente se iniciaron los trabajos de postproducción. Cuando Dylan escuchó un primer corte del acetato original (prueba que se hace antes de empezar a fabricar los vinilos para ver como va a sonar el disco) se dio cuenta de que las sesiones de Nueva York no le acababan de satisfacer y que ese no era el sonido que deseaba para su disco, así que echo hacia atrás su publicación dejando a su discográfica compuesta y sin LP para el mercado navideño.

Fue precisamente en navidad, cuando regresó a Minnesota a visitar a la familia, el momento en el su hermano David Zimmerman, tras escuchar el disco, le animó a que volviese a grabar alguno de esos temas con músicos locales. Los días 27 y 30 de diciembre se encerró en los estudios Sound 80 de Minneapolis para grabar de nuevo las seis canciones que no le gustaban de las sesiones anteriores (“Tangled up in blue”, “You're a big girl now”, “Idiot wind”, “Lily, Rosemary and the jack of hearts”, “If you see her, say hello” y “Meet me in the morning”, aunque al final esta última no se incluyó y se mantuvo la grabada en Nueva York) y de inmediato se dio cuenta de que eso si era lo que andaba buscando. Tal vez en este hecho (temas de dos sesiones distintas y con músicos diferentes) se encuentre la grandeza del sonido del disco ya que su mezcla de blues y folk hace que en ningún momento un estilo u otro llegue a tomar el peso suficiente, surgiendo de ese binomio una sucesión de momentos mágicos que logran romper la monotonía que a veces tienen sus composiciones.


A toda prisa Columbia se puso manos a la obra y apenas 18 días después de terminar la grabación (el 17 de enero de 1975) se empezaban a vender las primeras copias. El disco logró el numero uno de ventas y con el tiempo ha sido reconocida como una de sus grandes obras (por ejemplo en la lista que elaboró la revista Rolling Stone sobre los 500 mejores discos de la historia ocupa el puesto 16, sólo superado por Highway 61 revisited en el 4 y Blonde on blonde en el 9). Una anécdota curiosa que refleja las dudas que acorralaban a Dylan en esos tiempos es que, tras haber escrito esas canciones a mediados de año y dado lo personal de su contenido, decidió consultar a una serie amigos para que le dieran su sincera opinión. El primero al que acudió fue a Neil Young en una visita a su casa en California y a este le siguieron unos cuantos más, y no deja de sorprender que por primera vez tuviese dudas sobre sus canciones. Lo normal es que su situación personal le estuviese provocando una gran inseguridad y que ante ella necesitase que otros le dijeran lo que él ya pensaba.

Lo que en un principio apareció como un bootleg lleno de tomas alternativas e inéditas (sólo la mitad de los cortes finales de Blood on the tracks corresponden a esas sesiones neoyorquinas), con los años ya no lo es tanto, ya que algunas de esas versiones han aparecido publicadas de forma oficial, con lo que el material desconocido para los fans se ha reducido considerablemente. Eso no quita, en cualquier caso, que estemos ante un documento imprescindible para conocer y comprobar de primera mano la forma de trabajar que tiene Dylan en el estudio ya que la misma canción de una toma a otra parece completamente distinta variando en algunos casos incluso la letra.


En la relación de temas (todos son tomas alternativas de los ya publicados) que aparece un poco más abajo sólo los que tiene un asterisco detrás permanecen inéditos. El resto han sido publicados a posteriori de la forma que a continuación indico: “Up to me” aparecio en 1985 en Biograph; “Tangled up in blue (take 1)”, “Call letter blues”, “If you see her, say hello (take 1)” se publicaron en 1991 en The Bootleg Series. Vol 1-3; “Shelter from the storm (take 1)” fue incluida en 1996 en la BSO de la película Jerry Maguire de Cameron Crowe; “Simple twist of fate” y “You're gonna make me lonesome when you go” pertenecen al corte del acetato original y son la misma versión que aparece en el oficial pero con una velocidad el 2% más rápida y por último “Buckets of rain” es idéntica a la que se incluyó en Blood on the tracks.

Existen dos tomas más de esas sesiones que no aparecen en este bootleg y que también han sido publicadas y se trata de otra versión alternativa de “Idiot wind” (en The Bootleg Series. Vol 1-3) y la versión que en principio se iba a editar de “You're a big girl now” (en Biograph) y que luego se rechazó.

Lugar: Columbia A&R Sudios, Nueva York.
Fecha: 16 al 25 - Septiembre - 1974
Título del bootleg: Blood on the tapes (the New York sessions)
Listado de canciones:
01 - Tangled up in blue (take 2) *
02 - Simple twist of fate
03 - You're a big girl now *
04 - Idiot wind (take 2) *
05 - You're gonna make me lonesome when you go
06 - Call letter blues
07 - Lily, Rosemary and the jack of hearts *
08 - If you see her, say hello (take 2) *
09 - Shelter from the storm (take 1)
10 - Buckets of rain
11 - If you see her, say hello (take 1)
12 - Tangled up in blue (take 1)
13 - Up to me

Texto publicado en la revista Tarántula

domingo, 12 de mayo de 2013

Nacha Pop – Madrid, 23-Abril-1979



De las distintas fuentes de las que suelen beber los bootlegs una de las que mejor calidad de sonido garantizan son las tomadas de conciertos emitidos por las emisoras de radio. En España, sin duda, es Radio 3 la que dispone de un archivo más completo e interesante con material de todos los artistas nacionales y gran parte de los internacionales que en los últimos 35 años han sido algo (y también los que no) dentro del panorama musical. Hoy, aprovechando que se cumple el cuarto aniversario de la muerte de Antonio Vega, echaremos mano de una grabación emitida por esta emisora y que recoge el concierto que Nacha Pop ofrecieron como teloneros de Siouxsie & The Banshees en abril de 1979.

Los orígenes del grupo hay que buscarlos en el Liceo Francés de Madrid donde estudiaban Nacho García Vega (guitarra), Carlos Brooking (bajo) y Jaime Conde (batería). Hacia 1977 en compañía de Amhed (guitarra), otro compañero, habían formado un grupo que llamaron Uhu Helicopter en el que hacían versiones de sus grupos favoritos (Led Zeppelín, Jethro Tull, James Taylor, America, Eagles, Jefferson Airplane, Grateful Dead o Neil Young). En esos primeros tiempos les benefició el gran ambiente cultural que existía en ese colegio gracias al cual pudieron dar sus primeros conciertos y se les abrió la puerta de otros lugares similares.

Un primo de Nacho, Antonio Vega, empezó a pasarse de vez en cuando por los ensayos del grupo y, a pesar de ser cuatro años mayor que ellos, tocaba la guitarra y le gustaba la música por lo que esos intereses comunes hicieron que sus caminos confluyeran. Poco a poco se fue sintiendo más a gusto con su primo pequeño y sus amigos y, lo que empezó como un entretenimiento cuando volvía de Valencia en los permisos de la mili, terminó con su incorporación definitiva cuando se instaló de nuevo en Madrid. Llegados a este punto es justo decir que, aunque Antonio era el que más talento tenía y mejor tocaba, probablemente el solo nunca habría llegado a nada. Necesitaba un lugar en el que desarrollar todo lo que llevaba dentro y eso lo encontró en el grupo de Nacho ya que, aunque sabia escribir canciones, en cuestiones organizativas (ensayos, promoción, infraestructura...) era nulo y en eso sus nuevos compañeros le superaban con creces. El, por el contrario, les aportó el grado de experiencia necesario para que una banda sea viable, aunque hay que reconocer que enseguida se punieron las pilas para alcanzar un nivel como instrumentistas más que aceptable. Todo esto provocó el cambio del nombre del grupo que desde entonces pasó a llamarse Nacha Pop.


Pero la importancia del Liceo Francés en el nacimiento de Nacha Pop no se limita a que sus miembros estudiaran en sus aulas y ese círculo habría que ampliarlo a otros personajes (amigos de sus hermanos mayores) que, llegado el momento, les dieron ese empujoncito hacia arriba que luego ellos supieron aprovechar. Rafael Abitbol, Gonzalo Garrido y sobre todo Mario Armero se dedicaron a pinchar en Onda 2 sus primeras maquetas que pudieron grabar gracias a los contactos que los García Vega tenían en Polydor. Todos los sábados Nacho, su hermano mayor y otros amigos de éste se pasaban por las oficinas de la discográfica a escuchar los discos que recibían del extranjero y daban su opinión acerca de cuales pensaban que podrían tener éxito si se editaban en España. Gracias a ese contacto pudieron grabar de una forma bastante aseadita cuatro temas en los estudios de la compañía en los tiempos muertos en que no lo hacían sus primeros espadas y a principios de 1979 comenzaron a sonar en las ondas junto a las de otros grupos nuevos de la capital.

Otro elemento fundamental, que no hay que pasar por alto, es que todos formaban parte de una clase media-alta lo que les había permitido, además de conocer a gente con cierta influencia, viajar a Londres para estudiar ingles y empaparse, entre otras cosas, de lo que a nivel musical estaba sucediendo allí. Su aspiración era sonar como los grupos de la new wave británica y no pararon de trabajar de forma a veces obsesiva en el local de ensayo hasta lograrlo. Gracias a eso consiguieron en el mundillo una imagen de profesionalidad que les situó en la línea de salida muy por encima del resto de los grupos de su generación que, en general, no le daban tanta importancia y que hizo que ninguno de ellos llegara a sonar nunca en directo como lo hacían Nacha Pop (hay quien cree que de ahí vienen parte de los celos que generaban en determinados sectores de la movida).

Ese hecho, unido al buen rollo del grupo con Polydor (al fin y al cabo allí habían grabado sus maquetas y estaban a punto de ficharles), hizo que fuesen los elegidos por la compañía como teloneros de Siouxsie & The Banshees cuando les trajeron a actuar para apoyar su lanzamiento en nuestro país. No era su primer concierto (habían tocado en colegios mayores, facultades y también en el Teatro Martín) pero si el estreno ante un gran aforo (unas 2000 personas) y sobre todo una importante prueba de fuego ya que iban a jugar en un terreno que se preveía hostil ante un público que no había pagado para verlos a ellos y, en el mejor de los casos, los consideraba el inevitable estorbo previo a la salida de los británicos.


La tarde del 23 de abril de 1979 se subieron al escenario del Teatro Barceló de Madrid cuando la sala aún estaba medio vacía y lo primero que llama la atención es su sonido que, aunque iría forjándose poco a poco, en este momento era el de un grupo de punk-pop, tocando de una forma cruda, con rabia y mucha convicción. Los que pudieron estar allí hablan de un momento mágico e intenso y las crónicas de la época se rinden a ellos y les ponen en la cabeza de los grupos que empezaban a despuntar en Madrid. Dentro del repertorio llama la atención que Sol de Caribe ya era el tema con el que cerraban sus conciertos, el tempo más lento con el que interpretan Chica de ayer y, sobre todo, la presencia de cuatro temas que un año después quedarían fuera de su primer LP y que aún permanecen inéditas.

Pero, al margen del éxito musical, la importancia de aquella noche en la vida de Nacha Pop fue que Hispavox puso sus ojos en ellos y, tras una rápida negociación, los ficha adelantándose a Polydor que seguía sin terminar de decidirse. Desde ese momento el funcionamiento en el seno de la banda empieza a cambiar. Antonio se vuelve definitivamente en un obseso de las cuestiones técnicas y el buen sonido, y si a eso le sumamos que es el que mejor toca y que empieza a tomar las riendas compositivas, la imagen de cara al exterior es que él es el líder indiscutible. Pero lo bueno que tuvo la banda es que Nacho era el nexo de unión por un lado entre su primo y el resto de sus compañeros y por otro de todos con el exterior, por lo que la simbiosis entre ambos y esa necesidad mutua hizo que pudieran avanzar y evolucionar tan rápidamente.

En septiembre grabaron las maquetas del que sería su primer disco y desde ese momento su nueva compañía prohibió que se siguiesen emitiendo las anteriores en la radio. El 2 de noviembre protagonizaron la inauguración de la sala El Sol y, aunque unos días después tuvieron que renunciar a abrir el concierto de Elvis Costello en Barcelona por un repentino ataque de apendicitis de Jaime, su situación era inmejorable para convertirse en la gran sensación musical de la siguiente década. La salida definitiva del batería y su sustitución por Ñete se produjo cuando les llegó el momento de entrar a grabar el disco y se dieron cuenta de que las bases rítmicas eran el punto más débil de las maquetas y necesitaban a alguien más solvente para dar el salto definitivo de calidad. Lo que sucedió partir de ese momento ya es historia, la de uno de los mejores grupos que hemos tenido, la de Nacha Pop.

Lugar: Teatro Barceló, Madrid.
Fecha: 23 – Abril – 1979.
Título del bootleg: Teatro Barceló 1979.
Listado de canciones:
01 - Presentación de la banda
02 - Gasoleo meo
03 - Día tras día
04 - Eres tan triste
05 - Mujer de cristal
06 - Chica de ayer
07 - Me va tu mama
08 - No pretendas
09 - 50 pop
10 - Sol del Caribe

Texto publicado en la revista Tarántula

miércoles, 24 de abril de 2013

Nick Cave & The Bad Seeds – Linz (Austria), 9-Octubre-1986



Atravesar “La puerta de atrás del paraíso” es entrar en un mundo vedado para unos pocos. La primera vez que se abrió esa puerta fue en julio de 1969 cuando en algunas tiendas de Estados Unidos apareció un extraño disco que, bajo el nombre de Great White Wonder, recogía una selección de temas inéditos de Bob Dylan. Desde entonces las grabaciones de esas canciones condenadas al olvido o de conciertos, momentos únicos que mueren una vez que se apagan las luces del escenario, se han convertido en objetos de deseo buscados por coleccionistas y amantes de la música que buscan matar el mono ante la ausencia de material oficial de sus artistas favoritos. Es discutible si es ético, al margen de su legalidad, hurtar al creador la capacidad para decidir que parte de su obra ve la luz y cual debe quedar guardada bajo llave. Lo innegable es que gracias a ellas se puede conocer mejor, para bien y para mal (siguiendo con Dylan es sabida su facilidad para descartar para sus discos canciones soberbias y publicar otras de una calidad bastante inferior), la forma de trabajar e incluso de ser de los artistas… Y eso es lo que trataremos con nuestras miradas furtivas por la rendija que nos deja esa puerta entreabierta del paraíso musical.

El momento en el que se enclava este primer concierto que comentaremos coincide con el del despegue definitivo de Nick Cave hacía un olimpo musical que, aunque todavía le costó un poco alcanzar, ya se veía como un camino de no retorno. Había aterrizado en Londres en febrero de 1980 procedente de Australia en compañía de los otros miembros de su grupo, The Birthday Party (Phill Calvert, Tracy Pew, Rowland S. Howard y Mick Harvey), con la esperanza de encontrar en la capital británica la comprensión que les había faltado en Australia. Por contra se dieron de bruces con una ciudad hostil que, a causa de la recesión económica y el talante excesivamente conservador de la inefable Margaret Thatcher, había dejado de ser el hervidero de música y cultura de años atrás para convertirse en el campo de batalla en el que el punk daba sus últimos coletazos y los sintetizadores y sonidos inofensivos dirigidos a las pistas de baile trataban de abrirse paso.

Pero a pesar de todo tuvieron suerte. En ese momento, tras la explosión un par de años antes de la New Wave, primaba la mediocridad y los grupos empezaban a repetirse por lo que no les resultó difícil hacerse con un hueco entre nombres del after punk y siniestros como The Cure, Bauhaus o Siouxsie & The Banshees. En cualquier caso no llegaron a adaptarse nunca ni a la ciudad ni al entorno así que, aunque habían publicado un par de discos y alcanzado su objetivo de vivir de la música, en 1982 deciden emigrar de nuevo e instalarse en Berlín, un lugar aparentemente amable y con una vida cultural más creativa y arriesgada. Llegados a este punto Calvert decide no cruzar el Canal de la Mancha y al poco tiempo, a causa de sus enfrentamientos con Cave y Pew, Howard también hace las maletas por lo que el proyecto, tocado de muerte por los abandonos y otros problemas internos, termina fracasando.

Dadas las circunstancias Nick Cave decide seguir en solitario y enseguida empieza a rodearse de algunos músicos con los que ya había trabajado o conocía y pretendía que fuesen algo más que una mera banda de acompañamiento. La primera formación de The Bad Seeds estaba compuesta por su antiguo compañero Mick Harvey, Blixa Bargeld (guitarrista de Einstürzende Neubauten), Barry Adamson y Hugo Race, y con ellos graba "From her to eternity", muy bien recibido por la crítica y los seguidores de su anterior banda que vieron una evolución coherente y no rupturista de su sonido. Su segundo trabajo, fuertemente influenciado por el blues y llamado “The firstborn is dead”, no recibió ese aplauso mayoritario, lo que unido a la pesadilla en que se convirtió la gira de presentación, hizo que rápidamente pasase página y se metiera de lleno en la preparación de un nuevo disco.

Bajo el nombre de “Kicking against the pricks” reunió una serie de versiones de sus temas y artistas favoritos interpretados, como no, desde su personal punto de vista. John Lee Hooker, Johnny Cash, Lou Reed o Roy Orbison son algunos de los que se vieron homenajeados por Nick y esta vez la opinión general volvió a coincidir de forma unánime y el respeto y admiración por la banda empezó a consolidarse entre prensa y público. Grabado a finales de 1985, los problemas por un lado con el estudio que secuestro las cintas hasta cobrar, y por otro con su discográfica que interpretó mal sus deseos y se vio obligada a repetir la portada una vez que estaba en las máquinas, hizo que su publicación se retrasase hasta septiembre del año siguiente.

En julio de 1986, decepcionado con la espera y para no perder el estudio que tenían reservado para realizar las mezclas del álbum de versiones, aprovecharon para grabar un nuevo álbum. “Your funeral... my trial” es el claro ejemplo de lo maravilloso que es el vinilo como formato y lo aséptico que resulta el CD. Editado como doble EP era la culminación de un antiguo proyecto en el que las canciones de cada uno de los discos tendrían conceptos totalmente diferentes. Así, mientras el primero es más espontáneo y concebido en el estudio con una atmósfera obsesiva y en plan experimental, el segundo refleja a la banda de forma más cruda y directa, tal y como sonaban sobre el escenario. Cuando unos años después se editó la edición en CD se cambio el orden de las canciones, se incluyó una para aumentar el minutaje y, evidentemente, no apareció en versión doble. Una vez más la industria pisoteaba el concepto original del artista.


La idea original de la discográfica era publicar en septiembre “Kicking against the pricks” y, para no saturar el mercado, dejar para el año siguiente la de “Your funeral...”, pero Cave se negó. Tras meses parado y dos discos bajo el brazo lo que le apetecía era tocar las canciones en las que había estado trabajando y no estaba dispuesto a esperar tanto tiempo. Acepto retrasar el segundo unos meses pero no la gira de presentación de ambos que tenía cerrada desde hacia tiempo y que le llevaría por algunos países de la vieja Europa y Estados Unidos.

En cualquier caso, para evitar que la brecha con la compañía se hiciera más grande, en la primera parte de la gira y hasta la publicación de “Your funeral…” dejó que el peso del repertorio recayera en las versiones, que mezclaba con un puñado de sus clásicos en unas relecturas de lo más interesantes y alguno de los temas nuevos para que sus seguidores fuesen abriendo boca. El concierto que hoy recomendamos pertenece a esta fase y, tanto por su calidad de sonido como por ser uno de los pocos de ese periodo del artista que se conservan íntegros, resulta una pieza imprescindible para cualquiera interesado en la obra de Cave. La gira fue un éxito y se prolongó hasta finales de año, aunque la noticia de la muerte de Tracy Pew destrozó a sus antiguos compañeros e hizo que estos últimos shows fuesen más oscuros si cabe.

Recién iniciado 1987 el cantante recibió la oferta del cineasta alemán Win Wenders para participar en “Wings of desire”, su nueva película, a lo que él aceptó encantado. Desde ese momento y con cada trabajo iría creciendo poco a poco su prestigio y número de seguidores hasta convertirse en lo que es ahora, un referente de la música de nuestro tiempo, padre de alguna de las tendencias existentes y uno de los creadores más personales y geniales que hoy en día se pueden encontrar.

Lugar: The Posthof de Linz (Austria)
Fecha: 9 - Octubre - 1986
Título del Bootleg: Black folder
Listado de canciones:
01 - I'm gonna kill that woman
02 - She fell away
03 - By the time I get to Phoenix
04 - Long time man
05 - Train-long suffering
06 - Knocking on Joe
07 - Jack's shadow
08 - Your funeral, my trial
09 - From her to eternity
10 - The singer
11 - All tomorrows parties
12 - The carnival is over

Texto publicado en la revista Tarántula