viernes, 25 de septiembre de 2009

Los días de vinagre y rosas de Joaquín Sabina

No se si aquí lo habré dicho alguna vez, pero mi artista nacional favorito (y por mucho que los Vegas, González, Ferreiros, Chaouens, Urquijos, Calamaros y Rots, Jotas, Bunburys, Lapidos o Vetustas se lleven actualmente más horas de mi tiempo) es, sin ninguna duda, Joaquín Sabina. Nuestra relación viene de muy atrás y casi nunca me ha defraudado por lo que supongo que ahora, que los dos somos más viejos (y probablemente él más exigente con su trabajo que yo con mi opinión hacia el mismo) ninguno está por la labor de que esa situación cambie.

Han pasado ya más de cuatro años del “Alivio de luto” y tres desde mi/su ultima visita a Las Ventas, y la verdad es que ya apetece echarse a la boca y al oído su nuevo disco que, por lo que contaba Panchito Varona en su blog hace exactamente una semana está recién concluido y listo para entrar en las máquinas. Supongo que todavía nos tocará esperar un par de meses (aun no hay fecha para su publicación) pero seguro que a más tardar para la campaña de navidad lo tendremos entre las manos.

Lo que ya están a la venta son las entradas para su concierto en el estadio de Boca Juniors en Buenos Aires de 20 de enero de 2010, aunque no me extrañaría que antes de volver a España para iniciar su gira por pequeños recintos primero y otros más grandes después, regalase alguna fecha más allende los mares… Por mi parte yo le esperaré en septiembre, espero que de nuevo junto a Lucas, para abrirle la puerta grande de Madrid…

Dejo para los interesados un video en el que aparece un tema que Sabina ha dedicado al poeta Angel González (escrito a medias con Benjamín Prado) y que interpretó en el programa “Hoy por hoy” de la Cadena SER el 19 de mayo de este año (la foto que encabeza este texto pertenece a ese momento y la hizo Javier Jiménez Bas) y detrás el texto que el viernes pasado apareció en el blog de Varona y que bajo el título “Habemus álbum!” nos cuenta sus impresiones tras finalizar la grabación del nuevo trabajo del maestro.

Ahora solo cabe esperar que los días de vinagre y rosas de Sabina también sean los nuestros…




Habemus álbum!

Tolón, tolón, redoblan las campanas de mi barrio que es Aravaca... Los fieles salen a las ventanas y gritan jubilosos ¡Tenemos disco, habemus álbum!...

Pues sí.

Ayer lo terminamos o casi... Quedan un par de detalles para que el disquito vaya a la fábrica de hacer cedeses.

Quisimos brindar en el estudio con champán pero no sé qué pasó que el champán no llegó... El mensajero se lo habrá quedado, supongo. El caso es que había ambiente de celebración: estábamos los tres cerditos (Romero, De Diego y Varona) junto con el jefe JS y su señora que es mi amiga que es mi hermana que es mi novia. Y estaba Juanito, ingeniero de sonido y Luis, su ayudante. Y estaba el cuarto beatle (¡ya quisiéramos nosotros!) que es Sir Jaime Asúa. Y escuchábamos las canciones y babeábamos.

Hubo que poner las canciones en su orden...Joaquín empezó el orden del disco y se lo terminé yo cuando él dijo "me estoy liando...". Y lo escuchamos en su orden y nos dimos cuenta de que la segunda debía ser cuarta y la cuarta segunda. Ahí fue donde decidió Joaquín definitivamente que el disco se llamaría "Vinagre y rosas".
Y es un disco muy bonito, bonito y largo, bonito y especial, muy especial. Hubo un momento en que estuvimos a punto de lagrimón, no sé si fue oyendo la séptima o la octava... Muy emocionante todo.

Y nos dimos unos abrazos (cualquier excusa es buena para sobarse un poco...somos muy sobones) muy sentidos porque hemos trabajado mucho desde el mes de noviembre en que nos juntamos para empezar a darle forma a esta cosa redonda con un agujero en medio.

En noviembre empezamos con muchos bríos, en diciembre se nos bajaron los humos. Luego Joaquín y Benjamín Prado viajaron a Praga y se trajeron un puñado de buenísimas letritas nuevecitas y relucientes. Y ahí nació el disco realmente, en Praga.

Después vino el viaje a Rota y el subidón musical... Y luego un segundo viaje a Rota con otro subidón.

En junio nos metimos en el estudio y empezamos a grabar las bases, las baterías, las guitarras y bajos... Y llegó Joaquín y tolón, tolón.

Paramos en agosto veinte días para desengrasar y en septiembre hemos vuelto para poner la guinda al pastel. Tolón, tolón.

Estamos encantados, señoras y señores. Estoy totalmente seguro de que os va a gustar, de que os va a encantar. Aunque sé que un artista como mi niño, que vende cientos de miles de discos, tiene gente que le adora y gente que no le gusta lo que hace. Y habrá gente que diga que "Dímelo en la calle" era mucho mejor, y que éste está entre Pinto y Valdemoro. Me da igual. Ayer estuve a punto de llorar oyéndolo y eso es lo que me importa ahora mismo.

Os quiero. Os beso.

Pasado mañana me voy a México con mi hermano Antonio Gª de Diego a cantar unas rolas en varias ciudades. Qué felicidad acabar un gran disco y viajar a un gran país! Allí lo celebraremos con unos tequilazos! Y luego, a la vuelta del viaje, habrá que ponerse a ensayar... Jijiji... Para volver a viajar pero todos juntitos... Jijiji... Pronto, muy pronto... Jejeje…

Tolón, tolón.

Monaguillo insurgente Varona.

No hay comentarios: